Descripción
El ácido sulfúrico es muy corrosivo, oxidante y deshidratante por lo que en contacto con los tejidos los puede dañar severamente. Incluso una mínima cantidad de ácido sulfúrico en contacto con la piel causaría quemaduras químicas graves. Al contacto con los ojos, puede provocar daño permanente y ceguera.
También hay que ir con cuidado de respirar el gas liberado por las reacciones del ácido sulfúrico con otras sustancias, ya que provoca dificultad para respirar y una sensación de ardor en el sistema respiratorio.
El ácido sulfúrico por sí solo no presenta riesgo de incendio o explosión pero hay que tener en cuenta que puede ser combustible en combinación con otros materiales, incluso con el agua.
Debe manipularse con goggles y con ventilador o campana de extracción.